Con los empleados dedicando más tiempo a actividades de colaboración que nunca antes, ¿están aportando el nivel adecuado de compromiso mental y emocional al grupo para maximizar la efectividad?

Recientes investigaciones han descubierto que el número promedio de reuniones a las que asiste un empleado ha aumentado en un 150% desde marzo de 2020, y los empleados están dedicando más tiempo a actividades de colaboración.

El impacto de una mayor colaboración (es decir, equipos) es que los empleados tienen dificultades para aportar el nivel adecuado de compromiso mental y emocional a cada equipo, lo que resulta en una menor productividad, especialmente si los objetivos y expectativas no están claros.

Puede requerir una gran inversión para que las organizaciones construyan equipos efectivos. Para asignar gastos, tiempo y recursos de manera inteligente, es necesario establecer primero si se debe crear un equipo para lograr un resultado o si se puede lograr el mismo resultado de manera más eficiente y rentable mediante un grupo de trabajo.

También es importante que los empleados sepan si son parte de un equipo o si trabajan individualmente. Si a un grupo de trabajo se le llama equipo pero no funciona como tal, puede generar alienación para todos los involucrados y resultar en una satisfacción y rendimiento reducidos.
Si se necesita un equipo, es importante establecer una dirección clara y acordar metas y resultados compartidos. Esto ayudará a los miembros a sentir un sentido de pertenencia y compromiso, lo que fortalece el propósito y la dinámica del equipo y aumenta su efectividad.

¿Cuál es la diferencia entre un equipo y un grupo de trabajo?

Los equipos son interdependientes y están unidos por un propósito compartido. Los miembros conocen a los demás miembros y alcanzan metas comunes juntos. En contraste, los grupos de trabajo están compuestos por un conjunto de individuos que están más débilmente asociados y no dependen mutuamente para completar un proyecto o lograr un resultado.

Un “precontrato” ayuda a identificar si un grupo de personas es un equipo o un grupo de trabajo, y cuál es el mejor para completar un proyecto o iniciativa. Esto es importante porque algunos proyectos o iniciativas se entregarán de manera más eficiente mediante un grupo de trabajo, mientras que otros lo harán mediante un equipo. Además, si se llama a un grupo de trabajo equipo pero no funciona como tal, puede generar alienación para todos los involucrados y resultar en una satisfacción y rendimiento reducidos.

Los equipos de alto rendimiento son necesarios para mejorar el impacto empresarial a largo plazo, y la investigación muestra que el primer paso para construir un equipo de alto rendimiento es establecerlo formalmente como equipo a través de un precontrato.

4 puntos de acción para establecer un equipo de precontrato efectivo

Una vez que el equipo ha establecido que es un equipo, puede continuar definiendo el marco en el que operará el equipo. También es más fácil encontrar una solución para desarrollar la efectividad del equipo y maximizar el retorno de la inversión.

En un equipo efectivo, cada miembro comprende y respalda los procesos, metas, acciones y decisiones del equipo. Si no se cumplen las metas, cada miembro se compromete a lograr un mejor resultado en el futuro.

Tu organización puede construir un equipo de precontrato efectivo siguiendo estos cuatro pasos:

· Realizar entrevistas con el/los líderes y miembros del equipo para identificar necesidades, temas, desafíos y áreas de enfoque.

Utilizar estos conocimientos para decidir qué intervenciones, tales como capacitación en habilidades o mayor alineación de liderazgo, deben llevarse a cabo para ayudar al equipo a aprender cómo trabajar juntos y volverse efectivos.

· Utilizar evaluaciones y encuestas diagnósticas para rastrear y monitorear el sentido colectivo de pertenencia y propósito, y cómo esto impacta en la agilidad del equipo.

Las sesiones de trabajo específicas pueden ayudar al equipo a fortalecer el sentido de pertenencia y propósito, así como las capacidades individuales en el flujo del trabajo diario.

· Utilizar el coaching de equipo para identificar brechas de habilidades basadas en objetivos.

El coaching puede ayudar a los líderes a desarrollar habilidades y construir un entorno donde la confianza, la seguridad psicológica y la dinámica de relaciones armoniosas puedan prosperar. Esto facilitará un alto rendimiento sostenido.

· Fomentar que el equipo cree sus propios hábitos, normas y procesos de equipo para impulsar su rendimiento.

Repetir las evaluaciones diagnósticas en un período acordado para identificar los cambios y el impacto en la organización.

Efectividad del Equipo

El programa Efectividad del Equipo de LHH es una solución personalizada diseñada para ayudar a los empleadores a construir equipos más cohesionados, donde los empleados se sientan parte de un grupo y trabajen hacia metas compartidas.

A través de una serie de intervenciones individuales y grupales, este programa abordará las prioridades del equipo, creando un marco para adoptar nuevos hábitos de equipo durante un período de tiempo, lo que mejorará su rendimiento general en su camino hacia un mayor éxito del equipo.