Tengo el privilegio y la oportunidad de conversar con frecuencia con gerentes de recursos humanos de las organizaciones más importantes y también altos directivos de head hunting más prestigiosos. A ellos siempre les pregunto sobre las habilidades claves que se buscan en los posibles futuros colaboradores. Si bien cada profesión exige habilidades distintas, hay ciertas características que ellos siempre mencionan, cuando hablamos en confianza.
Estas son algunas de ellas y lo que preguntan al entrevistar talentos.

Decencia. Hoy más que nunca y en esta difícil coyuntura donde tanta corrupción se ve por todos lados: ¿Tienes tus valores bien puestos? ¿Podrás tener las manos siempre limpias? ¿Podré confiar que no caerás en actos incorrectos o conflictos de interés que terminen comprometiendo a la empresa y a sus directivos en temas delictivos?
Adaptabilidad. ¿Serás uno de nosotros? ¿Podrás adaptarte a nuestra cultura y al cómo hacemos las cosas aquí? ¿Podrás interactuar y colaborar en este entorno y en los distintos mundos en los que actuarás por nosotros? ¿Podrás integrarte a equipos de toda clase y tipo sin dificultad? ¿Aceptarás trabajar en entornos y circunstancias siempre cambiantes?

Autenticidad. ¿Eres quien dices ser? ¿Eres quien pareces ser? ¿Puedo confiar en la imagen que proyectas? ¿Tendrás de verdad esos sentimientos y valores que dices tener? ¿Podré confiar in ti y en tu integridad?

Curiosidad: ¿Tienes una mente inquieta con ganas de aprender, investigar, dominar temas nuevos, arriesgarte a salir de tu zona de confort? ¿Tienes la curiosidad que necesitamos para encontrar e identificar las tecnologías exponenciales que impactarán disruptivamente en nuestro negocio? ¿Puedes crecer intelectual y culturalmente para aprender y hacerlo cada vez más rápido?

Ambición. ¿La tienes? ¿Tienes razones o motivaciones personales lo suficientemente fuertes que, bien alineadas con las nuestras, te movilicen para hacer esfuerzos realmente excepcionales? ¿Entiendes claramente que no te pagaremos por venir a trabajar, sino por agregar valor y mucho a la organización? ¿Eres claro de cuál puede ser ese valor?

Flexibilidad. ¿Podrás cambiar cada vez al ritmo que necesitamos? ¿Podrás desaprender y volver aprender sin quedarte fijado a tus paradigmas originales? ¿Eres capaz de renovarte continuamente? ¿Tienes una mente abierta que recoge lo mejor de cada nueva situación? ¿O tendrás ideas o estilos fijos e invariables que harán de cada día una tortura para ti?

Agradable. ¿Eres alguien con quien me provoca trabajar? ¿O viajar? ¿Eres fácil y llevadero? ¿Tienes buen carácter y sentido del humor y sobretodo una actitud positiva ante las dificultades? ¿Eres maduro y estable y soportas bien la tensión sin quebrarte o explotar? ¿Tienes un corazón cálido?

Carácter. ¿Tienes fuerza y carácter para enfrentar las interminables luchas y batallas que acompañan los cargos de responsabilidad? ¿Podrás manejarte en situaciones complejas rodeado de incertidumbre sin quebrarte? ¿Podrás cumplir metas exigentes y muy retadoras? ¿Podrás tomar decisiones duras con criterio?
Como ven, lo que todos buscan y todos queremos es poder trabajar con gente de “buena madera”, ética, trabajadora, talentosa, con mentes curiosas y buenos corazones. ¿Eres uno de ellos?

Fuente: Inés Temple – Presidente LHH DBM Peru y Chile.