Todos sabemos que tenemos que trabajar constantemente para mejorar nuestra marca personal y nuestra empleabilidad. Tenemos talento y saber mostrarlo es clave para ello. Por eso, aquí, brindo algunos consejos para demostrar toda nuestra capacidad:
1. Pregunta. Preguntar demuestra interés y atención. La calidad de las preguntas define más a una persona que incluso sus respuestas. Sin miedo, sin timidez; ninguna pregunta es tonta si es que se hace con genuino interés. Pero haz preguntas cortas, no tomes la palabra para hacer discursos.
2. Habla poco. No eres dueño de la verdad y a nadie agrada un fanfarrón. Habla sólo cuando tengas algo para aportar. La capacidad de síntesis es una importante manifestación de la inteligencia. Pero lo más importante, aprende a escuchar con máxima atención; desarrollarás la empatía.
3. No alardees tus conocimientos. Siempre hay alguien que sabe más, tiene más experiencia o es más inteligente – y justamente por eso se calla. No des lecciones a los demás. Muestra respeto por la inteligencia de los otros, que eso es señal de inteligencia y madurez.
4. No critiques. La negatividad y la queja, no sólo cansan, sino que impiden avanzar. Además pueden interpretarse como señal de debilidad para entender, hacerse cargo o liderar. Los talentosos resuelven, ponen manos a la obra y encuentran soluciones creativas a los problemas – son los que ven la luz al fondo del túnel. Enfócate, planea, resuelve, actúa.
5. Lee y mantente vigente. Hay que tener curiosidad, mantenerse actualizado. Inscríbete en cursos o seminarios. La velocidad de lectura y de aprendizaje son claves.
6. Preparación y dedicación. Ser talentoso no es excusa para la vagancia. Así como un 10 no es sinónimo de inteligencia, pero una nota promedio, suele asociarse a mediocridad. Uno debe esforzarse por cumplir plazos y por destacarse. Hacerlo demuestra profesionalismo y seriedad.
7. Desarrolla la inteligencia emocional. Esa es quizá la más importante de las habilidades. Implica escuchar, empatizar y generar confianza. Saber manejar tus emociones es fundamental tanto para la vida profesional como personal.
8. Comunicación no verbal. Debes prestar atención al lenguaje corporal. Siempre mira a los ojos, mantén una buena postura que muestre que estás alerta, atento, interesado y presente en el momento. Eso es lo que hacen los talentos, suelen estar interesados en todo para aprender.
9. Ética. Condúcete con propiedad, decencia y decoro. Nadie sale impune hoy día, porque todo se hace público, todo puede verse por internet.
10. Ni soberbia ni arrogancia. Si quieres destruir tu marca personal y ganar enemigos: alardea, muéstrate superior. Por el contrario, si hablas con honestidad y humildad sobre tus logros, desarrollarás relaciones interpersonales. Mostrar que tienes talento no es lo mismo que “hacerse el talentoso”.
Fuente: Inés Temple – Presidente LHH DBM Peru y Chile
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