Una de las preguntas más comunes en las entrevistas hoy en día es alguna variación de: “¿Qué te diferencia del resto de los candidatos para este puesto?” Otras versiones incluyen: “¿Por qué deberíamos contratarte?” o “¿Qué te hace distinto de todas las demás personas que están entrevistando para este puesto?”
No importa cómo esté formulada exactamente, la intención es siempre la misma: conocer cuáles son tus mayores fortalezas y habilidades, qué te hace único y cómo eso puede traducirse en éxito en el puesto para el que estás entrevistando.
Paso 1: Estudiar a fondo la descripción del puesto
Lo primero que debés hacer, al pensar cómo responder, es leer detenidamente la descripción del puesto. En realidad, léela varias veces. Memorízala si es posible. Luego preguntate: ¿Cuáles son las una o dos competencias más importantes para tener éxito en este puesto?
Tené en cuenta que te llamaron a la entrevista porque, al menos en el papel, los reclutadores ya creen que vos tenés esas competencias. Tu desafío en la entrevista es demostrar que no solo las tenés escritas en el CV o en tu perfil de LinkedIn, sino que las aplicaste de verdad.
Paso 2: Identificar y preparar ejemplos concretos
Una vez que hayas definido cuáles son esas habilidades clave, el siguiente paso es preparar ejemplos concretos y detallados de cómo las usaste en tu trabajo actual o en experiencias previas.
La palabra detallado no se puede subrayar lo suficiente. Querés dejarle al entrevistador una imagen muy clara de cómo aplicaste esas fortalezas en el pasado y qué resultados conseguiste. Podés apoyarte en:
– Datos duros (ej.: aumento de ventas, crecimiento en porcentaje, cantidad de visitas, reducción de costos, etc.).
– Reconocimientos (promociones, premios, menciones destacadas).
– Proyectos específicos en los que tu aporte fue clave.
Paso 3: Practicar tu respuesta
Una vez que tengas los ejemplos, practicá tu respuesta. Podés hacerlo mentalmente, pero lo ideal es ensayar en voz alta. Prestá atención a:
– Las partes en las que te trabás o dudás.
– El nivel de entusiasmo que transmitís (cuidá no sonar plano o inseguro).
– El tiempo: la respuesta debe ser clara y concisa, no más de dos o tres minutos.
Recordá: estas son tus fortalezas. Tenés que mostrarte seguro y, sobre todo, entusiasmado por aplicarlas y seguir desarrollándolas en el nuevo rol.
Paso 4: Mostrar tu diferencial sin exagerar la “unicidad”
Cuando los entrevistadores hablan de “qué te hace único”, no significa que tengas que inventar algo que nadie más pueda tener. Más bien, se trata de mostrar cómo tu manera de aplicar esas fortalezas te diferencia.
Por ejemplo: puede que otros candidatos también tengan experiencia en gestión de proyectos, pero quizás vos tenés una trayectoria particular en proyectos multiculturales o en contextos de cambio acelerado. Esa especificidad es la que te va a distinguir.
Paso 5: Usar la descripción del puesto como mapa
Finalmente, si en algún momento de tu preparación dudás sobre qué incluir en tu respuesta, volvé siempre a la descripción del puesto. Esta es como un mapa: te indica el camino correcto para no desviarte.
En Conclusión
La clave para responder a “¿Qué te diferencia del resto?” está en tres pasos: conocer en profundidad qué busca la empresa, demostrar con ejemplos concretos que tenés esas fortalezas y expresarlo con claridad, seguridad y entusiasmo. Eso es lo que realmente hará que te destaques frente a otros candidatos.