Es crucial definir quién eres, lo que has logrado y qué buscas. Cuéntales historias que muestren tu verdadero ser.
Puede sonar extraño, pero aprender un nuevo lenguaje puede ser clave para afrontar la pérdida de empleo de manera positiva y tener éxito en la búsqueda de trabajo. No hablo de aprender otro idioma, sino de expresarte de una forma diferente. Es un reto. Conseguir un nuevo trabajo a veces implica presumir un poco sobre ti mismo cuando lo que realmente quieres es ser auténtico. La clave está en entender que ser genuino y promocionarte de manera efectiva no son opuestos. El truco está en encontrar las palabras adecuadas.
Hay diversas formas en que el lenguaje puede jugarnos en contra. En un extremo están aquellos que simplemente no saben qué decir. Quizás por modestia (‘Soy más de actuar que de hablar’) o por dudar de sus propias habilidades (‘¿En verdad mis habilidades son especiales?’), estas personas batallan para encontrar las palabras precisas para presentarse en el mercado laboral.
En el otro extremo están aquellos que tienen demasiadas palabras, demasiadas historias. En este caso, su verborrea puede enmascarar inseguridad (‘Mientras más hable, más serio me tomarán’) o indecisión (‘Como no sé qué rumbo tomar en mi carrera, les contaré todo’).
Para aquellos con un nivel ejecutivo superior, la tendencia puede ser usar un lenguaje demasiado técnico o lleno de palabras grandilocuentes. Aquí el problema podría ser, una vez más, la inseguridad (usar palabras complicadas para esconderse) o simplemente un hábito. Esas personas pueden estar acostumbradas a hablar en un lenguaje muy específico y no darse cuenta de que otros no los entienden. En todo caso, así como sucede cuando no sabes qué decir, ser demasiado franco puede bloquear la comunicación real. La calidad de lo que dices es más importante que la cantidad.
Sea donde sea que te encuentres en este espectro, un buen comienzo para presentarte de manera efectiva en el mercado laboral es siempre considerar a quién te diriges. Define quién eres, lo que has logrado y qué buscas. Cuéntales historias que muestren tu verdadero ser, pero también asegúrate de venderte bien. Aprende y utiliza el lenguaje que hable el mercado laboral y que llegue a quienes están reclutando nuevos empleados. Presentarte en términos familiares para tu audiencia potencial te ayudará a encontrar un punto medio entre decir muy poco o demasiado. Y de paso, te permitirá apreciar tus logros y habilidades de una forma distinta, reconociendo tu propio valor.