3 Preguntas que NO tienes que hacer durante una entrevista

La búsqueda de empleo puede ser un proceso desafiante y, en ocasiones, agotador. Cuando finalmente consigues una entrevista, es natural querer causar la mejor impresión posible. Sin embargo, algunas preguntas que podrías hacer, con la intención de demostrar interés o de obtener información clave, pueden terminar jugando en tu contra.

Esto se debe a que pueden hacerte parecer desesperado, transmitiendo la impresión de que solo buscas cualquier empleo temporal mientras encuentras algo mejor. Esto puede hacer que los empleadores duden de tu compromiso y de tus verdaderas motivaciones para querer formar parte de la empresa.

Si bien una entrevista de trabajo es una oportunidad para que ambas partes se conozcan mejor, algunas preguntas deben reservarse para etapas más avanzadas del proceso de selección. A continuación, te mostramos tres preguntas que debes evitar en una entrevista inicial y te explicamos por qué pueden perjudicarte.

1. “¿Cuánto pagan por este puesto?”

El salario es, sin duda, un factor importante en cualquier empleo. Sin embargo, no es un tema que debas abordar en la primera entrevista. Desde la perspectiva del empleador, la entrevista inicial tiene como propósito evaluar tu perfil profesional, entender cómo podrías aportar valor a la empresa y analizar si encajas en la cultura organizacional.

Mencionar el sueldo demasiado pronto puede hacer que el reclutador piense que solo te interesa el trabajo por el dinero y no por la oportunidad de crecimiento o por el impacto que podrías generar en la empresa. Además, muchas compañías tienen rangos salariales preestablecidos y discuten estos temas en etapas posteriores del proceso de selección.

En lugar de enfocarte en el salario en la primera entrevista, concéntrate en mostrar tu experiencia, habilidades y lo que puedes aportar al equipo. Una vez que el empleador haya manifestado interés en contratarte, será más adecuado discutir las expectativas salariales y otros beneficios.

Alternativa:

En lugar de preguntar directamente sobre el salario, puedes decir: “Estoy muy interesado en conocer más sobre las responsabilidades y expectativas del puesto. ¿Podría hablarme sobre las oportunidades de desarrollo dentro de la empresa?”

Esto te permitirá obtener información relevante sin parecer que solo te importa el dinero.

2. “¿Cuáles son los beneficios que ofrecen?”

Si bien es razonable querer conocer los beneficios que ofrece una empresa, abordarlo en la primera entrevista puede dar la impresión de que solo te interesa el puesto por las prestaciones y no por la oportunidad profesional.

Los empleadores buscan candidatos que estén genuinamente interesados en el rol y en la empresa, no personas que solo buscan un buen paquete de beneficios. Si preguntas demasiado pronto sobre estos aspectos, podrías hacer que el reclutador dude de tu nivel de compromiso.

Además, la primera entrevista suele ser una etapa de exploración donde ambas partes están evaluando si existe un buen ajuste entre el candidato y la empresa. Los detalles sobre beneficios y compensaciones suelen discutirse en entrevistas posteriores o cuando se extiende una oferta de empleo.

Alternativa:

Si quieres obtener información sobre el ambiente laboral y las oportunidades que ofrece la empresa, podrías preguntar: “Me encantaría conocer más sobre la cultura organizacional. ¿Cómo describiría el ambiente de trabajo y las oportunidades de crecimiento dentro de la empresa?”

Esto te permitirá obtener una visión más clara de lo que puedes esperar sin enfocarte demasiado en los beneficios materiales.

3. “¿Cuánto tiempo tardaré en ser ascendido?”

La ambición y el deseo de crecimiento son cualidades valoradas por los empleadores, pero preguntar sobre ascensos en la primera entrevista puede dar la impresión de que no estás realmente interesado en el puesto inicial y que solo lo ves como un paso temporal.

Desde la perspectiva del empleador, un candidato que ya está pensando en el ascenso sin haber demostrado sus habilidades en el puesto puede parecer poco comprometido o impaciente. Además, las oportunidades de promoción dependen de múltiples factores, como el desempeño individual, las necesidades de la empresa y el tiempo en la organización.

Si haces esta pregunta demasiado pronto, podrías hacer que el reclutador se pregunte si estarás dispuesto a desempeñar bien el trabajo para el cual estás aplicando o si perderás el interés rápidamente si el ascenso no ocurre en el tiempo que esperas.

Alternativa:

En lugar de preguntar directamente sobre un ascenso, podrías decir: “Estoy muy interesado en el crecimiento profesional dentro de la empresa. ¿Podría contarme más sobre los programas de desarrollo y capacitación que ofrecen a sus empleados?”

De esta manera, demostrarás interés en tu evolución dentro de la organización sin parecer ansioso por una promoción inmediata.

Cómo Hacer las Preguntas Correctas en una Entrevista

Sabemos que una entrevista de trabajo puede ser un momento de nerviosismo, especialmente cuando realmente necesitas el empleo. Sin embargo, es crucial proyectar confianza y profesionalismo.

Si bien hay preguntas que es mejor evitar en una primera entrevista, eso no significa que no puedas obtener información clave sobre la empresa y el puesto. La clave está en la forma en que formulas tus preguntas.

Recuerda que el objetivo de la entrevista inicial es generar una buena impresión y demostrar por qué eres el mejor candidato para el puesto. Si evitas estas tres preguntas en la primera entrevista y, en su lugar, las reformulas de manera más estratégica, aumentarás tus posibilidades de avanzar en el proceso de selección sin dar la impresión de estar desesperado.

La paciencia y la estrategia son esenciales en la búsqueda de empleo. Haz las preguntas correctas en el momento adecuado y maximiza tus oportunidades de éxito.

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