10 preguntas de entrevistadores que indican que NO querés ese empleo

El miedo es una de las fuerzas más poderosas en el ámbito laboral, aunque rara vez se hable de él. Influye en nuestras decisiones, en cómo respondemos ante la autoridad y, en muchos casos, nos impide escuchar las señales que nos alertan sobre malas oportunidades profesionales.

Cuando una persona está atravesando una situación económica difícil o teme represalias en su entorno laboral actual, es fácil pasar por alto señales evidentes de advertencia durante una entrevista. Ignoramos esas alertas con tal de conseguir el puesto, aun sabiendo, en el fondo, que probablemente no será un buen lugar para trabajar.

Con el tiempo, sin embargo, aprendemos que tener el coraje de decir “no” a una mala oportunidad es una forma de abrirle la puerta a una mejor. Cuanto más difícil sea rechazar una oferta que no se alinea con nuestros valores o necesidades, mayor suele ser la recompensa de haberlo hecho.

A continuación, presentamos diez preguntas frecuentes en entrevistas que deberían hacerte reflexionar seriamente sobre si ese empleo es realmente adecuado para vos. No se trata solo de evitar trabajos malos: se trata de proteger tu tiempo, tu energía y tu bienestar.

Diez preguntas que son señales de alerta:

1. ¿Cuántas ausencias imprevistas tuviste el año pasado?
Esta pregunta minimiza las realidades humanas y familiares, y prioriza la asistencia por sobre el bienestar. Un enfoque poco empático.

2. ¿Qué dirían tus últimos tres jefes sobre vos?
Supone que la opinión del jefe es incuestionable, ignorando dinámicas laborales tóxicas o arbitrarias.

3. ¿Cuál es el salario mínimo que aceptarías?
Una pregunta orientada a pagar lo menos posible, no a reconocer tu valor profesional.

4. ¿Te comprometés a quedarte al menos dos años?
Indica desconfianza o que las condiciones podrían generar una alta rotación.

5. ¿Alguna vez te despidieron?
Descontextualiza una experiencia laboral sin entender los motivos ni aprendizajes derivados.

6. ¿Qué partes de tu CV están exageradas?
Parte de la presunción de que estás mintiendo, lo cual resulta ofensivo e innecesario.

7. ¿Qué te hace más calificado que los demás candidatos?
Fomenta la competencia innecesaria entre postulantes, en lugar de valorar tus fortalezas.

8. ¿Cuál ha sido tu mayor fracaso profesional?
Mal enfocada, esta pregunta busca exponerte, en vez de comprender cómo enfrentás desafíos.

9. ¿Tenés disponibilidad para trabajar noches y fines de semana?
A menos que esté claramente establecido en la descripción del puesto, sugiere expectativas poco saludables.

10. ¿Cómo manejás compañeros o jefes difíciles?
Denota que ya hay conflictos en el equipo, y que esperan que vos los gestiones sin apoyo.

¿Qué revelan estas preguntas?

Una entrevista también es un primer encuentro entre personas que podrían colaborar juntas. Iniciar ese vínculo desde el prejuicio, la desconfianza o el control es una señal clara de que algo no está bien en la cultura de esa empresa.

Las entrevistas son una oportunidad de doble evaluación: el empleador analiza al candidato, pero el candidato también analiza a la empresa. Si te encontrás con preguntas que te resultan incómodas, ofensivas o invasivas, eso también es información valiosa.

Ninguna organización que valore realmente a su talento iniciaría una relación profesional desde la desconfianza.

¿Qué deberían preguntar las buenas organizaciones?

Así como es útil reconocer las señales de alerta, también es clave identificar qué tipos de preguntas reflejan una cultura organizacional sana, orientada al desarrollo humano y al respeto mutuo. Algunas preguntas positivas podrían incluir:

  • ¿Qué te motiva en un entorno laboral?
    Permite al empleador conocer tus valores y alinear expectativas desde el inicio.

  • ¿En qué tipo de proyectos disfrutás trabajar más?
    Aporta información valiosa sobre tu perfil y fortalezas, sin caer en la competencia interna.

  • ¿Cómo te gustaría desarrollarte profesionalmente en los próximos años?
    Muestra interés por tu crecimiento, no solo por cubrir una vacante.

  • ¿Qué condiciones te ayudan a dar lo mejor de vos?
    Invita a hablar sobre bienestar y rendimiento desde una mirada integral.

Este tipo de preguntas no solo generan un ambiente más cálido en la entrevista, sino que también ayudan a construir relaciones laborales más saludables y sostenibles.

Confiá en tu intuición

Una entrevista no debería ser un interrogatorio, sino una conversación. Si algo no te cierra, es válido agradecer y dar un paso al costado. Escuchá tu intuición. Cuidar tu dignidad profesional también es parte de construir una carrera con sentido.